El ex barcelonista tuvo la primera gran ocasión de la final, pero se quedó sin marcar y sin su segunda Champions; debía haber sido la final de Neymar pero el brasileño fue invisible, intrascendente y fallo un gol en la primera mitad. Con el pitido final rompió a llorar desconsolado. Las cámaras de televisión no dejaron de buscarle, igual que los jugadores del Bayern, que no pararon de consolarle.
Con las manos en los ojos y entre lágrimas abandonó el terreno de juego, donde varios jugadores del Bayern intentaron consolar al delantero del PSG. El primero que le ofreció un largo consuelo fue Alaba, aunque tanto sus compañeros del PSG como varios rivales del conjunto bávaro también tuvieron muestras de consuelo para el brasileño.
A pesar de ser uno de los mejores jugadores del torneo, Neymar no pudo marcar la diferencia en el momento crucial y cayó en la final de la Champions de 2020, a la que no llegaba desde 2015, cuando la conquistó con el FC Barcelona frente a la Juventus en Berlín.
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