Irak.- Al menos 82 personas han muerto y otras 110 han resultado heridas luego de explotarse una bomba de oxígeno en la unidad de cuidados intensivos (UCI) del Hospital Ibn al Jatib.
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Según el Ministerio del Interior de Irak, el atroz hecho fue por causa de la negligencia del centro médico, ya que este carecía de sistema de protección contra incendios, lo que permitió que los falsos techos propagaran el fuego debido a su composición muy inflamable.
“Lo ocurrido es una muestra de negligencia. Haremos un comité bajo la dirección del titular de Interior para establecer responsabilidades y presentar los resultados en un plazo máximo de cinco días”, aseguró el ministro, Mustafa Al-Kadhimi.
Por otro lado, la Comisión de Derechos Humanos de Irak lamentó el hecho y aseguró que el suceso es considerado un crimen:
“Han puesto sus vidas en manos del Ministerio de Sanidad y en vez de curarse, han muerto pasto de las llamas”.
De acuerdo con el primer examen realizado por el departamento de Defensa Civil, la mayoría de las víctimas murieron al ser trasladadas porque se las desconectó de los ventiladores; otras se asfixiaron por el humo.
Las autoridades emitieron una orden de detención contra el director del hospital y los encargados de la seguridad y el mantenimiento para rendir cuentas de lo ocurrido.
