Estados Unidos.- De acuerdo a las investigaciones de la autoridades, un hondureño residente en Port Arthur, una ciudad ubicada al este de Houston Texas, contrato a un sicario para que matara a su suegra y a cuñado quien vivía en la Aldea las Lomitas de El Paraíso.
Según las declaraciones realizadas por Santos Orellana Hernández, a la policía él se declaró culpable de pagarle a un sicario de nombre Gustavo Ramírez, de Honduras para que matara a los familiares de su entonces esposa, Edith Argueta Vásquez, la cual residía con él en Estados Unidos.
Así mismo, Hernández confesó que le ofreció a Gustavo la cantidad de ocho mil dólares, para que ejecutara a los familiares de Edith Argueta, después de que se concretara el divorcio entre ellos.
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Por otra parte, Argueta mencionó que las palabras que su ex esposo utilizó, fueron fuertes y causo temor en ella.
«Lloraras lágrimas de sangre»
Palabras que utilizó Santos a su expareja.
Sin embargo, Santos Orellana fue declarado culpable por un juez Federal de Distrito Thad Heartfield, del uso de instalaciones comerciales interestatales en la comisión de asesinato a sueldo, manipulación de un testigo mediante intimidación y conspiración.
Por otra parte; el juez felicitó la excelente labor del equipo de investigación y la fiscalía que viajo a Honduras para entrevistar al testigo y preparar el caso penal, contra el señor Orellana Hernández, gracias a este trabajo no hubo ningún derramamiento de sangre.
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