Por Darkshak Beltrán
Estados Unidos.- Una pareja de Tennessee, tuvo que tomar una decisión difícil, ya que debían elegir entre interrumpir el embarazo o dejar que su bebé naciera con anencefalia.
Esta es una condición en la que los recién nacidos pueden vivir un máximo de media hora, esto de acuerdo a la opinión de expertos.
Krysta Davis y Derek Lovett fueron fuertes, y convencidos, llevaron su embarazo a termino, creyendo que lo mejor para todos era aprovechar cada segundo de vida de su criatura.
De acuerdo a declaraciones de la madre, disfrutó cada movimiento dentro de su vientre, cada patadita y latido del corazón de la bebé que se desarrollaba en su vientre.
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El momento había llegado para la familia
Mientras esperaban el alumbramiento, el equipo médico advirtieron a la pareja que quizás podrían tener a la bebé entre sus brazos por solo media hora.
Sin embargo; la pequeña a quien llamaron Rylei, resultó ser toda una luchadora, que no so solamente vino a este mundo sin la formación adecuada de su craneo y cerebro; sino que también sobrevivió mucho más de lo dicho por los médicos.
La niña, sobrevivió por una semana completa en la que sus padres la apapacharon y le dieron todo el amor que tenían para ella.
Ellos lo describieron como «Una vida entera en solo una semana».
Donación de órganos de Rylei
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Al final de esa semana llena de felicidad, llegó la realidad.
Rylei partió de este mundo y su corazón se dividió en dos mitades, cada una sirvió para que otros dos angelitos pudieran sobrevivir.
Mientras tanto; sus pulmones fueron donados para realizar a un centro especializado en la investigación de anencefalia.
